que puedo hacer si hablas y es inevitable,
que puedo hacer si te acercas y no quiero ignorarte,
qué puedo hacer si me castigo para evitar mirarte y sonreirte porque no es debido.
Pero ya no soy capaz de evadirlo y simplemente me miras,
te miro y sin darme cuenta nuestras miradas nos llaman
como si estas fuesen una especie de iman ... el iman que nos atrapa.
qué puedo hacer si no dejo de pensarte,
tu imagen se aparece, se dibuja en el tablero de mis clases,
tu imagen la tengo como si fuese un tipo de pega loca que no se sale.
Ese es el imán del que te hablo,
el imán que nos persigue no sé si para unirnos,
el imán que no se aleja, que no quiere que te detengas,
que ninguna de nuestras palabras se quede en el silencio.
Se trata del imán que quiere vernos,
lo siento!!! lo siento fuerte cuando vienes y te apareces,
siendo tu y siendo yo...
¿Lo sientes?
De alguna manera todos llevamos un imán dentro, algunos más fuertes que otros.
ResponderEliminarSaludos ;-)
Yo no llamaría "Unos más fuertes qué otros" ... En el mundo químico no existe un protón que tenga mayor polaridad que un electrón, viéndolo desde dicho aspecto... Me gusta ... Es encantador, dice mucho, se entrega, así mismo como el Imán se aferra a un metal, como el metal viene al imán ... Me encanta la unión, la percepción de la unión.
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