Esa noche extrañé sus besos de esos que hacían eco,
esa noche extrañé sus labios, sus intensos labios carnudos con sabor masmelo y caramelo,
esa noche extrañé sus palabras, palabras que salieron después de uno de esos besos, a través
de sus labios de caramelo con masmelo o masmelo con caramelo,
esa noche como la de anoche extrañé tanto sus enredos para hablarme más del tiempo
que no pude detener el sueño despierto de tenerlo en sueños mientras duermo.
Anoche lo vi en el techo, decía su nombre entero en todo el centro,
anoche vi su imagen, decía hola, decía te amo y lo sentía justo a mi lado,
anoche casi lo llamo, dije su nombre entre las cobijas y besé la almohada,
anoche quedé atrapada en el insomnio, en el territorio de mi mente.
Esa noche como la de anoche, lo quería conmigo, te he querido conmigo, a todas horas
en toda la madrugada y toda la mañana, solo para mi,
anoche y todas la noches te extraño como si no te tuviera en muchos años.
